ANIVERSARIO EN EL MÁM

Hoy 13 de mayo, se cumple un año del fallecimiento de Ángel Mateos Bernal, eterno saboteador en los dominios de la conformidad, indoblegable hasta el final.

Tras años de retiro aquejado de Alzheimer, Ángel Mateos descansó por fin. Tras el fallecimiento seis meses antes de su mujer, Aurora, el declive fue rápido, pues siempre se supo cuidado por ella-.

 

 

Los restos del que fuera una de las personalidades artísticas más importantes de esta tierra descansan en el panteón familiar de Villavieja de Yeltes, que él mismo concibió cuando su padre, Antonio, falleció.

 

 

 

 

Y tranquilo descansa sabiendo que sus esculturas habitan el museo que para ellas concibió. Su último gesto de rebeldía e independencia: sabía que a él, su ciudad nada le iba a regalar. Su ubicación, en Doñinos de Salamanca, es su último desdén hacia “lo establecido”, como le gustaba decir; su último grito de rebeldía e independencia.

 

Descansa en paz. Seguiremos cuidando tu legado.

HEMEROTECA. ÁNGEL MATEOS EN GALERÍA RAYUELA, 1982.

Ángel Mateos en la Galería Rayuela, Madrid 1982. La exposición que mostró las dos vías en las que su escultura deambulaba: la más monumental y arquitectónica ligada al hormigón y la obra final puramente minimalista. 

 

Con Miguel Fernández-Braso
Con Carmen Moro

En 1982 Ángel Mateos realizó la que sería su última exposición individual en una galería privada; fue en la Galería Rayuela, fundada por Miguel Fernández-Braso y Carmen Muro en la calle Claudio Coello, en Madrid.

En ella Mateos expuso sus últimas esculturas de entonces, la serie denominada Horizontales, realizada en hormigón, su material representativo, pero también expuso unas nueva serie de obras en granito Negro Oriental -de las cuales surgiría más tarde la exposición de Esculturas Flotantes en el Tormes-.

Eran años de plena madurez creadora y de intensa actividad artística de un creador consciente y, todavía ilusionado.

Horizontal III, 1981
Horizontal VI, 1981

A finales de los 70 y principios de los 80, Mateos expuso en varias ocasiones en colectivas con artistas constructivistas; su obra, dentro del constuctivismo, estaba adquiriendo un fuerte carácter arquitectónico que se manifiesta plenamente en esta serie de Horizontales. En ella podemos ver la influencia que un arquitecto, Frank LLoid Wright, tuvo en la escultura de Ángel Mateos. Su escultura estaba manifestando un fuerte carácter arquitectónico que esta serie de Horizontales evidenciaba.

De forma paralela a su vertiente arquitectónica, la continua búsqueda de la esencia y el propio proceso creativo, conducían a Mateos por la senda minimalista. Gran parte de los años 80 estuvo experimentando con el m inimalismo, desgajando el bloque. Las expuestas en esta galería Rayuela, eran Desplazamientos realizadas en granito negro pulido; bloques de granito a los que realizaba un corte para realizar un leve desplazamiento que alterara el original volumen. Este concepto y punto de partida ya lo había empleado Mateos anteriormente en los años 70,  iniciado con los menhires, flexiones, verticales… En el 82 el paso del plano al volumen único era el camino lógico e irremediable.

De esta serie surgió las obras que dieron lugar a la exposición de esculturas en hierro flotando en el Tormes. Pero eso será otra historia.

Desplazamientos

 

 

museo en Salamanca – museos de salamanca – galería rayuela – galería fernandez-braso – carmen muro 

#museo en Salamanca – #museos de salamanca – #galería rayuela – #galería fernandez-braso – #carmen muro 

ANIVERSARIO DEL MONUMENTO A VALLADOLID

 Este mes de mayo, la escultura de Ángel Mateos erigida en Valladolid para conmemorar el IV centenario de la fundación de la ciudad, cumple 20 años. El 27 de mayo se inauguraba esta enorme escultura de Mateos, la mayor realizada por el artista, la más importante, tanto por dimensiones como por complejidad técnica: a una altura de 22 metros, un nudo de formas de 15 m. de vuelo se sustenta sobre únicamente dos pilares. Un prodigio técnico en el que no se aprecia ni una sola coquera ni ninguna junta en todo el encofrado.

Fue su último trabajo en escultura, pues Ángel mateos ya se había alejado de los círculos artísticos expositivos y estaba centrado en la conclusión de su museo, el cual se terminó de construir un año más tarde, en el 2000.

Esta escultura, Inversión VIII supuso la materialización de su gran deseo: ver sus esculturas realizadas a gran tamaño.

Y es que el “escultor del hormigón” veía sus esculturas como “maquetas de sí mismas”; la monumentalidad que impregna su obra es fruto de la propia concepción de las mismas y del hormigón. La simbiosis entre la intención del escultor y el material que emplea, ha un legado artístico tan personal y coherente que resulta imprescindible en el arte de hoy.

Con motivo de este aniversario, la Fundación MÁMeh ha editado este pequeño vídeo y pone a disposición de todos algunos de los artículos sobre la inauguración del monumento, extraídos de la hemeroteca del Museo Ángel Mateos. Aquí os los dejamos: